Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de julio, 2014

La Peste

Con su mirada fija al ventanal de su consultorio el doctor tenía en sus manos el resultado de la prueba. La madre tomaba de su mano a la niña, apretaba sus labios moviéndolos de un lado a otro, su preocupación era necesaria. El galeno tomó asiento y de inmediato soltó una frase que cambiaría por completo el rumbo de la familia. “Lo siento, su hija está infestada de Peste”. El pueblo tenía fama de ser un sitio inspirador, de altas montañas que jugaban con ese cielo rojizo tan particular en ese lugar no tan común. Sus calles soportaban a diario el peso de problemas innecesarios y sueños sin cumplir, el tiempo nunca visitó esas tierras de frescura. Sus pobladores eran conocidos en toda la región como gente culta, de buenas costumbres, y trato cordial al visitante. Esa imagen sólo podía verse en retratos y cuadros de artistas ambulantes. La peste tumbó al pueblo de ese sitial de honor que ocupara por mucho tiempo. El profesional tenía dudas sobre las causas que permitieron la en

Entrevista a Milagro Villalobos

La metamorfosis de una estrella oculta entre las montañas trujillanas Milagro Villalobos: Del artístico Almendrón a las milagrosas raíces de Jesé Estuvo a un paso de ser una actriz consagrada de nuestra nación. De aquella niña que en el patio de su casa era la protagonista de todas sus historias aún quedan retazos. Escondida bajo el silencio de un pueblo andino olvidado nos cuenta los distintos cambios camaleónicos que ha vivido y que la han transformado en lo que es: Un Milagro de vida. David José Rojo/ECS Milagro Villalobos en el capítulo final de la telenovela "Por estas Calles" Las marcadas curvas de su cuerpo invitan al viento a separarse. Él quiere jugar con su cabello rebelde, pero una liga de tela lo encadena, lo esclaviza. Sus ojos almendrados hacen juego con sus cejas grabadas por las manos de un artista. La puerta rosada se abre, estirando sus mejillas y frente, tallada por ríos secos, pero que permiten una sonrisa expandida como el mar. Más d

El Cibercafé

  Los habitantes del pueblo andino olvidado acostumbraban a pasar sus ratos de ocio en la plaza del lugar o bañándose en el río de la localidad, que para ese entonces aún tenía fama de ser limpio. Un domingo en la tarde era precedido por un juego de Bingo, los bendecidos por la suerte salían ganando una suma de dinero que no esperaban tener para ese entonces. Los que no contaban con la misma suerte, podían dar una vuelta por las calles en compañía de amigos y conocidos. El buscar información se tornaba tediosa, las bibliotecarias recibían con una sonrisa de bienvenida a los visitantes. El olor a hoja podrida y los gritos de personajes atrapados en algunas cajas de embalaje contrastaban con el ventilador que giraba lentamente en el techo, y que al parecer debía refrescar el lugar. Una biblioteca que tenía apariencia a un cuarto de niño que a un santuario de la imaginación.

Conversando con un Extranjero

En Septiembre una noticia sacudió el mundo entero. En Nueva York se realizaba la Asamblea General de las Naciones Unidas, y gran parte de los presentes pedían un cambio de postura en las tensas relaciones entre Rusia, China  y Estados Unidos, quienes habían amenazado con emprender una lucha armada que podía desencadenar una Tercera Guerra Mundial. El panorama sería distinto a su predecesora, ambos bandos utilizarían los efectos catastróficos del medio ambiente a sus antojos. Entonces ocurrió lo que nadie esperaba. 25 sofisticadas naves, aparecieron sobre el cielo tenue de Manhattan esa tarde de Septiembre. Sin ser detectados violaron las extremas medidas de seguridad que rigen esta nueva Guerra Fría. La defensa Estadounidense quedó obsoleta, pero no parecía un ataque ruso, o chino. Una bandera de lo que a simple vista parecían ser estrellas aterrizaron en las inmediaciones del edificio de la ONU. El comisionado de paz del Universo había llegado para tomar la palabra. Desde e

Vidas encontradas

Ese viernes Diego Pérez abrió sus ojos antes que sonara el despertador, una costumbre heredada por su madre que lo incentivaba a creer en el “poder de la mente”, antes de acostarse él le hablaba  a su cerebro y siempre parecía funcionarle. Tomó un baño y marchó de inmediato al trabajo, olvidó tomar café, sabía por experiencia propia que no tener cafeína en su cabeza era sinónimo de dolor de cabeza. Pensó por el camino cómo contrarrestar eso. Se persigno, dio las gracias al creador y encomendando su día a él comenzó la dificultosa jornada laboral que se le había asignado. Javier González se levantó más tarde de lo acostumbrado. Su madre que marchaba a su jornada laboral justo antes de que saliera el sol, le dejó una nota y la comida aún caliente escondida en un trapo que servía de escudo para aquellas moscas que no eran invitadas al banquete del adolescente. Comió sin haberse cepillado, tomó su café, se dio un baño y se preparó para ir a trabajar. Guardó su equipo, se puso la gor

Soledad Silente

Estaba cansada de ser siempre el plato de segunda mesa. De estar tras las cortinas ocultando su verdadero sentir, de sólo recibir migajas de un amor que parecía no correspondido. Fue entonces que decidió actuar. Soledad no dejaría pasar por nada del mundo la oportunidad que se le presentaba. Conocía  José desde que era un niño, tenían la misma edad. Convivían en un mundo dificultoso para él, pero no tanto para ella. A sus brazos llegaba su amado cada vez que las circunstancias de la vida lo hacían llorar, cuando su corazón terminaba roto por un mal amor pasajero y cuando en la oscuridad de la noche celebraba los pequeños triunfos que el destino le tenía. Soledad era muda, eso no le restaba a su existencia, al contrario, el ser silenciosa le permitía recibir confianza como pocas. Ella se había enamorado también y aunque a este mundo debía venir sólo a cumplir el papel de “pañuelo de lágrimas” intentaría luchar por el hombre que amaba.

Los países del Suburbio

Un lector constante de mis historias me preguntó por Hangouts ¿Cuáles son los países que más te visitan? Y que si estaba en mis manos escribiera lo que sabía de cada uno de ellos. No había tenido tiempo para sentarme a escribir este tipo de temas. Si decidía hacerlo no podía meterme al internet a buscar información. Me dijo, que me dejara guiar por mis instintos y que anotara el personaje que más recordara por cada país.  Al despertarme, sé que tengo que levantarme de mi cama, ducharme, cepillarme, vestirme, tomar el café y empezar a idear que voy a escribir. Les soy sincero, no me es nada fácil escribir una historia nueva a diario. Pensé mucho en lo que me dijo el lector y como hoy amanecí con el cerebro cansado, luego de lo difícil que fue escribir el post de ayer que llamé “La loca” les mostraré cuáles son los países que más visitan el Suburbio de Letras Nocturnas y lo que pienso de ellos. Les recuerdo que acepté el reto, y sólo me guiaré por lo que he visto, leído o escuchad

La Loca

Corrió de su casa a un lugar donde no llegarían a buscarla. La humillación que le había hecho su madrastra no tenía justificación alguna. Sabía que encontrar un refugio donde no conocieran  a su padre era casi imposible. Luego de tanto caminar consiguió lo que buscaba. La casa embrujada del pueblo andino olvidado era lo que necesitaba.

Segunda oportunidad

Eran las nueve de la mañana y él no se había despertado. Era algo que preocupaba a sus plantas del jardín y a Canelo, su perro. Al final abrió los ojos, cosa que le aseguraba que seguía con vida, tenía otra oportunidad de verla. Gonzalo limpió sus lentes y luego de asearse se acercó a la cocina. El aroma del café emocionaba a las rosas y girasoles, el hombre que las cuidaba seguía respirando esperanzas y alegrías. Gonzalo Romero era un anciano, podía decir cualquier persona joven que lo conociera. Vio la luz en una humilde casa del pueblo andino olvidado 75 inviernos atrás. Casi no salía y poco interactuaba con sus vecinos. Era "raro" según los patrones sociales del lugar. Desde que su consorte dejara este mundo 20 años atrás, para él no había felicidad en los cantos de los pájaros y emoción en los chismes que corrían por las calles empedradas de su confortable hogar. Pero de un tiempo para acá, Canelo notaba algo distinto en su dueño. Que jugara con él en las tardes e

Camisa de Brasil (II)

Brasil estaba en cuartos de finales. Derrotó a Chile en la tanda de penales en lo que parecía un juego muy cerrado. Ya no era ese niño que un día sufrió cuando su equipo favorito fue ahogado por los franceses en 2006, el mismo día que su madre le había comprado el atuendo, la camisa de Brasil. Estar en cuartos era recordar el fantasma que lo persiguió durante ocho años y no lo dejaba en paz. Colombia era el rival a vencer para seguir el camino a la final. Tantas cosas en conjunto hacían que este Mundial levantara pasiones en él. La fiesta del fútbol se celebraba en suelo suramericano, el grande del sur era la sede y su equipo sonaba como claro favorito a obtener el trofeo. Esto, por ser sede y haber obtenido la Copa Confederaciones en 2013, donde la canarinha derrotó con calma a la actual campeona del mundo, que para su sorpresa no llegaría siquiera a segunda ronda.

Cordón Umbilical

Rebeca era la menor de tres hermanos. Conocida como la consentida de la casa, sus padres cumplían todos sus caprichos sin pensarlo dos veces. Vivía llena de comodidades y “alegrías”. Estudiaba arquitectura y su sueño máximo era salir del pueblo andino olvidado y no volver. En su mente el ser “exitosa” era una palabra que la acompañaba desde que aparecía y se ocultaba el sol. En la Universidad era conocida por sus dotes de belleza. Una sonrisa suya iluminaba hasta los lugares más oscuros, y su mirada penetrante era capaz de despertar hasta las flores marchitas del pequeño jardín. Era catalogada la mujer más hermosa de la casa de estudio. Título que ganó en un concurso de belleza donde según muchos “no tenía competencia”. Ser reina la hizo parada obligatoria de los caballeros (y no tanto) que soñaban con mostrarla como trofeo obtenido ante sus similares.

El pueblo Andino olvidado

Existen pueblos en cualquier parte del mundo capaces de enamorar y cautivar a cualquiera que los visita, se envuelven en un pasado histórico y un presente innovador. Pueblos que entonan las notas más sublimes del amor, donde en cada calle o esquina se escuchan las voces de sabiduría y lucha de aquellos que vivieron tiempo atrás y dejaron al recuerdo testimonios vivos de la fuerza casi sobrenatural que poseen pocos seres humanos que llegan a este mundo buscando ser eternos. Algo que han conseguido plasmando sus nombres en las páginas de la historia mundial

Miss Venezuela

“…Al Miss Internacional va…Miss… ¡Guárico! Y Miss Venezuela 2013 es Miss Costa Oriental… ¡Migbelis Castellanos!”  Esta frase da el inicio a un sueño. Son las palabras que más de la mitad del país espera escuchar para conocer quién es la nueva soberana de la belleza nacional. Para la nueva reina el fin marca el inicio de un año de preparaciones que le permitirá llegar al Miss Universo con la etiqueta de favorita. Cuando la venezolana llega, todas las cámaras se posan sobre ella.

Amigos sin Fe

Cuando la bruja entró a la iglesia los vellos de aquellos que escucharían el sermón del día se erizaron. Las señoras “piadosas” que con velo negro ocultaban su rostro ante la imagen del Salvador apretaron fuerte la camándula y agacharon su cabeza hasta el fondo de sus sostenes. Unas para no ser descubiertas otras para no observar lo que ocurría. Un velón caído al suelo fue la señal de que la “hija del demonio” entraba en templo santo sin razón alguna. Su olor era inconfundible. Las hierbas que a diario utilizaba para recetar a sus clientes que llegaban a ella buscando un milagro para reconstruir un matrimonio, curar un mal de ojo y conseguir el apoyo de Don Juan del dinero seguían en su ropa. Limpiaba sus lentes, eso parecía. En realidad observaba por los cristales la caras de asombro que tras de ella se asomaban. Una cara conocida le sacó una sonrisa. El sacerdote del pueblo con algunos gestos la saludaba. Las herederas de la fe casi caen de sus bancas al observar tan sacríle

De Amor y Cadenas Rotas

Andrea Bracamonte rodeada por efectivos de la Policía Bolivariana La última vez que el presidente Chávez fue visto con vida por los venezolanos, fue a principios de diciembre en una cadena nacional. En ese momento designaba a Nicolás Maduro como su heredero político. Desde ese día hasta el cinco de marzo todo era confuso en la nación. Hasta que el anuncio llegó. “El Presidente ha muerto”. El pueblo andino olvidado no ofrecía a sus moradores lugares para el descanso y sano entretenimiento, eso ella lo sabía. Decidió pasar vacaciones en la “tierra del sol” luego de haber culminado un truncado año como estudiante de periodismo en una de las Universidades más prestigiosas del país, que por cosas del destino estaba muy cerca del lugar de los sueños rotos.